lunes, 21 de diciembre de 2015

Improvisar todo.



Volverse todos los sonidos, todas las sombras y todos los nudos, todas las voces, todos los bailes, todas las escaleras, todos los días, todos los pasos, todas las aves que se escuchan, todas las olas, todos sus sabores, todas las ansias, todas las nubes, todos los caminos, todas las piedras, todas las pérdidas, todos los dedos, todos sus  líquidos, todos los cerillos, todas las geometrías, todas las hojas, todas esas sillas, todos los mensajes, todas las alturas no importa cual, también sus latitudes, todas las notas, todos sus signos, todas las burbujas, todas las cenizas, y sus ceniceros, toditos los arbustos, todos los tonos, todas las chimeneas, todas las veredas que he visto, todas las estrellas, todos los agradecimientos, todo el polvo, todas las cuerdas, todos los puentes, todos los puntos, todas las posibilidades, todo el pasto, todas sus familias, todos los ojos, todos los que nunca fueron, todos nosotros, todos en uno, todos sus agujeros, devorar todos los colores del mundo, todos los zapatos, de todas las medidas, todos los lenguajes, todas las rocas, todos los palillos, toda la tinta, todas las ganas, todos todo, todos los que sirven tragos, todos los olvidos,  todas las plumas, todo lo que tiramos, todos los olores, todo sucio, todas las lluvias que nos mojan, todo lo que dejamos, todo lo que nos volvemos, todo el tiempo, todos sus límites, todas las fronteras, todas sus desconexiones, todo lo que tenemos, todo lo que no está descrito, toda la música, todos los blancos, todos los que nunca somos, toda la impotencia, todas las manos, todo lo construido, todas las cosas que nos mantienen, todo lo que no queremos, todo lo que desechamos, todo eso que prohiben, todo lo que tocamos, todo lo que suponemos que es todo, todo junto, todo lo posible, todo lo que vemos, todo el veneno, todo lo que es palpable, todo lo que no es, todas las cortinas, todas las miradas recogidas, todas las que no vimos.

Volverse todo al mismo tiempo, absorber todo al mismo tiempo.

M: Para siempre es demasiado tiempo...
-¿Cuándo regresas?
n: Nadie sabe...
- Nadie está en desacuerdo con el futuro.




Hoy el futuro no se asemeja a los barcos a la deriva.


jueves, 23 de julio de 2015

Animalia

Sin dar apenas detalle de lo que ocurre me desvío para incorporarme a la magia, volcarme a ella porque falta magia en éste entorno y voy raudo a impregnarme todo el cuerpo con miles de puntos, voy urgente a atestar el cuerpo de probabilidades.

Crepitar, hacer brotar a todas las plantas del ecosistema que habito, tomar ruta y buscar un tiempo en el que no haya vacío, espacio en donde no quepa el silencio. 

La palabra desgravitarse no existe, pero es algo muy cercano a eso.

Voy a invadir y salir por todos los poros
caer como tromba, incendiar bosques enteros
ataviarme y correr invadido de reflejos
cobijarme con el frío 
y absorber el calor
ése, cualquiera que ronde.  

Lanzo entonces las redes de viento y me salgo a pastorear ballenas.
He visto -mientras cruzábamos por carretera un desierto- miles de mariposas cruzando en migración.

Desato y coloco bien lejos los desequilibrios.

A: Pero si asegurabas que los encuentros solo se daban fortuitamente
n: ¿Fui yo?
A: Si, estabas chingue y chingue con lo de las líneas paralelas, nadie te entendió.
n: ¡Están cayendo pescados, están cayendo peces!



Posibles, hoy mundos posibles por favor.

domingo, 26 de abril de 2015

Inconexo.

Clip, clap, tap, tap, flap.

A lo lejos y con una sutileza natural de la sobra, se me incrusta directo el sonido brotante de los filamentos justo en el momento exacto en que se rompen, escucho los filamentos reventarse uno a uno casi con armonía, como comprobando la fragilidad dura que los une, y desplazándose con una tranquilidad entregada al tiempo, y tienen un ritmo que me hace pensar en una planeación anticipada: precisos y frágiles, entregados por completo a ésta gravedad.
Es casi seguro que intenten armar una armonía de su desastre. 
Escucho cómo brota.
Pienso en un diálogo entre las cuerdas de un piano: "hoy se rompe la quinta blanca, mañana negra 7, en diez minutos octava blanca" y así, dejándose ir, desconectándose  una a una cada una de las cuerdas.

Clip, clip, clip, tac, lap...clip...tap.

Me imaginé también los tensores de algún puente.
Inconexo el suelo, inconexo el aire.

...

El otro día platicaban sobre la gravedad, sobre la suspensión del peso y pensaba al mismo tiempo en la ligereza de lo que nos rodea, la ligereza que le damos a lo que verdaderamente nos importa.
El tiempo es lo que realmente determina ésta ligereza y la rotación es buen ejemplo para entender que todo es finito.
Y me imagino cómo sería ver los planetas.

n: Pero...aunque aseguremos que hay muchas cosas que nos importan, es una suposición, es falso porque podríamos prescindir de ello, 
a: ¿Cómo?
n: Lo que quiero decir es que quizá no nos importe demasiado, no tanto como lo pensamos, digo...es una posibilidad.
a: Si, podría ser.

Ése día por la tarde me di cuenta  que traía puestos zapatos distintos.

...

Intento entonces construirles a los filamentos un compás, una lógica porque ahora noto cómo lo acepto, cómo lo compruebo.



Hoy...hoy todo está conexo.